Hola,
soy Dumka, la verdad es que cuando vi a Batman por
primera vez me enfurecí bastante; vivía tan tranquila reina
y señora del piso en compañía de mis queridos dueños, cuando
de repente entró aquel torbellino que no paraba de irme
detrás maullando, se ve que me confundió con su madre o
con alguna tía suya, la verdad es que era muy pegajoso contándome
la historia de su abandono, me dijo que siempre había vivido
con más gatos e incluso perros, ¿qué es eso?, y que quería
que fuésemos amiguitos, ¡cómo que estaba
yo para hacer de niñera!
Bufé
y enseñé los dientes, eché las orejas para atrás y hasta
le di un arañazo en la nariz, pero no me valió de nada,
ante mis protestas Batman se hacía el desentendido y finalmente,
por aburrimiento, tuve que ceder.
La
verdad es que no me arrepiento porque es un buen chico,
perdón, un buen gato, y me hace mucha compañía. Como es
joven le gusta jugar y se divierte solo la mayoría de las
veces, yo no estoy para tanto salto y carrera, pero luego
nos reunimos a charlar de nuestras cosas compartiendo el
sofá. En fin, que no puedo quejarme, ¡he tenido mucha suerte
con que Batman
haya venido a vivir con nosotros!
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¡Y
esta es la historia!... |
¡Hasta
pronto! |
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