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EL
BURRO FLAUTISTA
De Tomás de Iriarte
Canarias
1750 - Madrid 1791
Esta
fabulilla,
salga bien o mal,
me ha ocurrido ahora
por casualidad.
Cerca
de unos prados
que hay en mi lugar,
pasaba un borrico
por casualidad.
Una
flauta en ellos
halló, que un zagal
se dejó olvidada
por casualidad.
Acercóse
a olerla
el dicho animal,
y dio un resoplido
por
casualidad.
En la flauta el aire
se hubo de colar,
y sonó la flauta
por casualidad.
iOh!,
dijo el borrico,
¡qué bien sé tocar!
¡y dirán que es mala
la música asnal!
Sin
regla del arte,
borriquitos hay
que una vez aciertan
por casualidad. |
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EL
CUERVO Y EL ZORRO
De Félix María Samaniego
Álava 1745 -1801
En
la rama de un árbol,
bien ufano y contento,
con un queso en el pico
estaba el señor Cuervo.
Del
olor atraído
un Zorro muy maestro,
le dijo estas palabras,
o poco más o menos:
Tenga
usted buenos días,
señor Cuervo, mi dueño;
vaya que estáis donoso,
mono, lindo en extremo;
yo no gasto lisonjas,
y digo lo que siento;
que si a tu bella traza
corresponde el gorjeo,
junto a la diosa Ceres,
siendo testigo el cielo,
que tú serás el Fénix
de sus vastos imperios.
Al
oír un discurso
tan dulce y halagüeño,
de vanidad llevado,
quiso cantar el Cuervo.
Abrió su negro pico,
dejó caer el queso;
el muy astuto zorro,
después de haberlo preso,
le dijo: Señor bobo,
pues sin otro alimento,
quedáis con alabanzas
tan hinchado y repleto,
digerid las lisonjas
mientras yo como el queso.
Quien
oye aduladores,
nunca espere otro premio. |