Las
profecías de Grigori Rasputín
El profeta
atípico de un inquietante futuro
De cómo Grigori Yefimovich Rasputín, un LEO ascendente
PISCIS, nacido el 29 de julio de 1871 en Poerowskoie, Siberia occidental, hijo
de campesinos, monje después y visionario siempre, llegó a ser el hombre más
poderoso y temido de la Rusia zarista, es un misterio que va intrínsecamente
unido al de su magnética personalidad.
Hombre
inculto, tosco, de moral probadamente dudosa -sus orgías y sus penitencias se
alternaban de continUo-, es él mismo una paradoja viviente, digno representante
de la idiosincrasia típica de la atormentada alma rusa, tan bien retratada y
vivida por el autor de Los hermanos Karamazov, por Tólstoi y por Gorki.
No
obstante, su inteligencia le permite superar las deficiencias educacionales
del medio en el cual nace, y ello, unido a un enorme carisma, le facilita el
acceso hasta la misma corte imperial, bien que esto último lo consiga a través
de sus dotes curativas y por la fuerza de sus poderes extrasensoriales, siempre
utilizando a las mujeres como sus mejores embajadoras.
¿Quién
fue en realidad Rasputín: un elegido, un santo, un enviado de Dios, un loco,
un fanático, un depravado y un oportunista?
Es
de suponer que nunca lo sabremos con exactitud, pero como del hombre lo único
que pervive es su obra y por sus obras se le conoce, e identificando a Rasputín
con los hechos de su existencia, diremos que pese a toda la leyenda negra, Grigori
Yefimovich tuvo una vertiente indiscutida de sanador y profeta.
Tal
vez, en este enigmático campesino siberiano, la ley pendular del Yin y el Tang
se daba en toda su amplitud y en él había luz y oscuridad alternativas.
Se
afirma que curaba la hidrofobia, que volvía fértiles a las mujeres ancianas
y otros muchos más prodigios que han llegado hasta nosotros y, en su tiempo,
a los oídos de la zarina Alexandra vía de la gran duquesa Anastasia –no confundir
con la desdichada hija de los zares, del mismo nombre-, su confidente.
La
emperatriz, cuyo único hijo varón está enfermo de hemofilia, recurre a un “milagro”
de Rasputín para aliviar los sufrimientos del pequeño zarevich que por aquel
entonces cuenta tres años de edad, y, a distancia, y por medio de la oración,
Grigori Yefimovich, frena una crisis del ilustre enfermito mejorándose éste
posteriormente, ello convence a la zarina que cae bajo su poderoso influjo,
y el resto ya es historia...
Pero
he aquí algunas de sus profecías, hasta ahora no muy difundidas mas innegablemente
reveladoras: el advenimiento del comunismo, las guerras mundiales, la contaminación,
las madres de alquiler y hasta la fecundación in vitro, se nos muestran
en ellas, por no hablar también de la contienda del Golfo Pérsico y del trágico
acontecimiento, mucho más reciente, acaecido del pasado 11 de septiembre.
Leed
pues y convenceros.
“Zar
de la tierra de Rusia, si tú oyes el sonido de la campana que te dice que Grigori
ha sido asesinado, debes saber esto, y si son tus parientes los que han provocado
mi muerte, entonces alguno de tu familia, es decir, ninguno de tus hijos o de
tus parientes, quedará vivo por más de dos años; ellos serán asesinados por
el pueblo ruso, rogad, rogad, rogad, sed fuertes, pensad en vuestra bendita
familia.”
“Antes
de que mi cuerpo se vuelva ceniza, caerá el Águila santa y será seguida del
Águila soberbia, caerán después las demás Águilas, una tras otra, y les serán
cortadas las cabezas, la última en caer será el águila del mar, y su sangre
será tragada por la tierra, y de la tierra surgirán tres brotes, que se secarán
antes de dar flores.”
“Se
arrastrarán a lo largo de los caminos d Europa tres serpientes hambrientas.
Y por los caminos por donde pasen, no quedará más que la ceniza y el humo. Su
patria será la espada y su ley la violencia. Y la espada morirá, arrastrándose
en el polvo y en la sangre una civilización, cuando la espada sea envainada,
hará nuevas leyes y nuevas banderas, pero las leyes tendrán todavía el germen
de la violencia. Y cuando los tiempos largos hayan acabado, tres nuevas serpientes
volverán a arrastrarse por los caminos de Europa, pero esta vez, sobre la tierra
señalada no crecerá más hierba.”
“Los
hombres están rondando la catástrofe. Serán los menos capaces quienes llevarán
las riendas, tanto en Rusia como en Francia, como en Italia y otros lugares...
El castigo de Dios llegará tarde, pero será tremendo. Y esto acontecerá antes
de que nuestro siglo acabe.”
“Los
venenos abrazarán la tierra como un fogoso amante. Y en el mortal abrazo, los
cielos tendrán el hálito de la muerte, y las fuentes no darán más que aguas
amargas y muchas de esta agua serán más tóxicas que la sangre podrida de la
serpiente. Los hombres morirán a causa del agua y del aire, pero se dirá que
han muerto del corazón o de los riñones... Y las aguas amargas infectarán los
tiempos como la cicuta, porque las aguas amargas parirán tiempos amargos.”
“Enfermarán
las plantas y morirán una tras otra. Las selvas se convertirán en enorme cementerio,
y entre los árboles secos vagarán sin rumbo hombres aturdidos y envenenados
por las lluvias venenosas.”
“El
útero de la mujer será como la tierra de los ríos; estériles serán ambos y ambos
parirán monstruos.
Día
desventurado será aquel día en que el útero materno será comercializado, como
se comercializa la carne de los bovinos, en este tiempo, el hombre, criatura
de Dios, se volverá criatura de la ciencia.”
“Fértiles
tierras serán transformadas en prisiones, y el sufrimiento humano será como
una lluvia sin fin. En la tierra entre los dos ríos, la muerte será invocada
incesantemente, pero el llanto no parará a la troika. El gran fuego no consumirá
a la maldad humana, y las prisiones continuarán pariendo el sufrimiento bajo
el cielo estrellado.”
“Por
todo el mundo se edificarán torres y se dirá que en las torres habitará la vida,
pero aquellas serán castillos de muerte. Algunos de estos castillos serán sacudidos
y de sus heridas saldrá sangre podrida que infestará la tierra y el cielo, grumos
de sangre infectada volarán rapaces sobre nuestras cabezas, y más de uno caerá
sobre; y la tierra donde caiga, se volverá desierta durante siete generaciones.”
“Dos
príncipes sanguinarios tomarán posesión de la tierra; Wiug vendrá de Oriente
y volverá esclavo al hombre con la pobreza, Graiug vendrá de Occidente y volverá
esclavo al hombre con la riqueza: Los príncipes se disputarán el cielo y la
tierra, y el terreno de la gran batalla será la tierra de los cuatro demonios.
Los dos príncipes serán vencedores... y los dos serán vencidos.”
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© 2001 Estrella
Cardona Gamio
BIBLIOGRAFÍA:
EL
ORÁCULO D RASPUTÍN
Autor: Manteia.
Ediciones
Martínez Roca. S.A.1981.
LE
PROFECIE DI RASPUTIN
Autor:
R.BASHERA.
© C. CARDONA GAMIO EDICIONES 1999-2011. Reservados
todos los derechos.